Los recrecidos se realizan normalmente de una sóla vez y en un único espesor, sin tener en cuenta los recubrimientos que se colocarán a posteriori. Es por esto que aparecen las diferencias de alturas entre los diferentes materiales, sobre todo cuando se coloca cerámica en proyectos de rehabilitación sobre pavimentos ya existentes.
Así es como de producen peligrosos escalones en los que se puede tropezar.
Este tipo de transiciones no son sólo zonas donde se puedan producir accidentes, sino que además contradicen todos los principios de una construcción sin barreras arquitectónicas adecuada para ancianos y personas con movilidad reducida.